The Tuskegee Experiment
Entre 1932 y 1972, los servicios de salud pública de los Estados Unidos realizaron el llamado experimento Tuskegee, que recibió su nombre por haber sido realizado en Tuskegee, Alabama.
El proyecto consistió en infectar a sujetos de prueba con el virus de la sífilis, con el fin de ver cuáles eran sus efectos sobre el cuerpo cuando la enfermedad no era tratada. Los sujetos de prueba casi siempre eran campesinos afroamericanos analfabetos, quienes eran engañados para creer que se les estaba proporcionando atención médica gratuita por parte del gobierno.
El experimento siguió su marcha incluso cuando la penicilina ya se utilizaba ampliamente como método para tratar la enfermedad. Cientos de hombres afroamericanos murieron a consecuencia del experimento y, como resultado directo, muchas de sus esposas e hijos también resultaron infectados.
Desde los años 60 se barajaba la existencia de este experimento, pero nunca se lo tomó en serio hasta que fue reportado por el "Washington Post" y el "New York Times".
En 1972, cuando la prensa filtró el proyecto, el experimento fue cancelado. Dos años después, se creó una comisión para regular la experimentación con humanos. Posteriormente en 1997, el gobierno de Estados Unidos realizó una disculpa pública.